Por Jorge Santa Cruz

Foto: Edificio del Departamento del Trabajo de los Estados Unidos. (Ed Brown/Wikipedia).

El neoliberalismo vendió al país; el socialismo, concluirá la traición entregando la poca soberanía nacional que le quedaba a México.

El gobierno de López Obrador sí aceptó que el de los Estados Unidos envíe agregados laborales para supervisar que las empresas exportadoras mexicanas cumplan con la reforma laboral hecha por Morena a la medida de los intereses estadounidenses.

Y lo que es más: el Departamento del Trabajo de los Estados Unidos contará con una línea telefónica especial para recibir denuncias anónimas de trabajadores mexicanos.

Todo está previsto en el Implementing Bill del Tratado  México-Estados Unidos-Canadá (T-MEC).

El presidente López Obrador mintió al decir que había sido una cláusula clandestina. El Implementing Bill que el gobierno de Trump envió a la Cámara de Representantes siempre estuvo a la vista del negociador mexicano Jesús Seade y, por ende, del gobierno de la 4T, al que le urgía la aprobación del T-MEC.

Tan urgidos estaban López Obrador, Ebrard, Seade y compañía, que el Senado mexicano, dominado por Morena, aprobó a las carreras el nuevo tratado. Ni Estados Unidos, ni Canadá, manifestaron tal urgencia.

Los alcances de la traición de la 4T

El Implementing Bill contempla que Estados Unidos pueda bloquear a las empresas mexicanas que exportan automóviles, autopartes, artículos electrónicos, acero, productos aeroespaciales, vidrio, cerámica, plástico, forjas, aluminio y productos de la industria panificadora.¹

A los Estados Unidos les preocupan, sobre todo, las violaciones a la libertad sindical y a la negociación de los contratos colectivos de trabajo.

El Implementing Bill considera otras sanciones, como la imposición de aranceles especiales a las empresas mexicanas infractoras o la eliminación de los criterios preferenciales de importación.

«Estas sanciones pueden llevar a las empresas a frenar su línea de producción, lo que representa un peligro para el negocio e incluso las puede llevar a la quiebra, coincidieron la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin) y la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra)».²

Tanto republicanos como demócratas quieren evitar a toda costa que las empresas mexicanas tengan ventajas, por mínimas que sean, sobre las estadounidenses (en salarios, contratos colectivos, sindicatos, etc.). Por ello, se aseguraron antes de que la reforma laboral mexicana estuviese hecha a su medida y que el T-MEC les permitiera intervenir en los asuntos laborales que deberían ser competencia exclusiva de tribunales mexicanos.

Ah, pero eso sí, la 4T se dice nacionalista y defensora de la soberanía de México. Miente, con todo el cinismo. Y lo que es peor: carece del valor para reconocer sus errores y traiciones.

Referencias electrónicas

1. Cfr. Ivette Saldaña. «Por T-MEC, EU podrá bloquear exportaciones a empresas incumplidas». El Universal. (Publicado el 17 de diciembre de 2019). Consultado en https://www.eluniversal.com.mx/cartera/por-t-mec-eu-podra-bloquear-exportaciones-empresas-incumplidas
2. Íbid.